«Creando la belleza» | Etapas pictóricas
Raúl Romero tuvo como maestros verdaderos a buena parte de los genios en la historia del arte. Y no es vanidad, sino ansia de superación, de experimentación, de buscar nuevos horizontes de descubrimiento en la pintura. La suma de muchas influencias, y la propia imaginación creativa. A lo largo de su carrera, el pintor toca todo tipo de temas utilizando técnicas diferentes, aunque es un artista con una clara evolución técnica, en el que el avance en una obra nunca desaparece en la siguiente, sino que busca la perfección de manera metodica, obsesiva, perfecta / imperfecta.
En cualquier artista vida y obra van siempre de la mano. Infancia, adolescencia, juventud, periodos de desarrollo que marcan la historia. En este caso, Romero alcanza la plenitud de conocimiento al entrar en Bellas Artes. Un mundo a su alcance, un teórico de la pintura, imbuido en el universo del Arte. Es su etapa de iniciación al color, al impresionismo, toques cubistas, colorismo y una intensa fuerza que le permiten experimentar en multitud de universos. Su etapa, los 80´, en la que el óleo, la témpera y el carbón, se funden en multitud de obra de técnica mixta impensable antes de realizarla. «Yo jamás seré viejo«. Y tenía parte de razón. Sus etapas, su egocentrismo culto, sus influencias pictóricas, pensaba que le harían inmortal en la pintura. Y así lo plasmó en su obra.
Podemos distinguir cuatro etapas y un epílogo: Clásicos | Figurativa | Abstracción | Figuras antropomorfas | Rayismo – puntillismo. Raúl Romero Altares pintó y dibujó más de mil quinientas obras que hoy están en instituciones, organismos públicos y colecciones privadas, fundamentalmente en Europa y América. No solo se dedicó a la pintura, sino también al dibujo, la experimentación técnica pictórica, la fotografía, etc. Sus etapas –y su vida- se dividen en varios periodos, con diferentes características, pero un denominador común: la obsesión por la perfección. El estado puro, el comenzar mil veces, y mil veces no “sentirlo” acabado. Como docente de Arte, no era capaz de corregir a sus alumnos de un modo común: hacía él mismo el dibujo o el diseño como corrección en los folios de los examinados.
Con el cambio del milenio, cambio de vida y clímax en su pintura. La decisión de establecerse en una aldea –ni ruido, ni gente- marcó su última etapa. Tiempo de soledad y de estudio. Tiempo de creatividad y trabajo geniales, en los que aunar “el punto y la raya” alcanza la leyenda. Maridar puntillismo y rayismo –a veces durante años- es sinónimo de exclusividad. El resultado son decenas de pinturas y dibujos irrepetibles en los que se aprecia la plenitud de una obra: perfección y detalle hasta “nunca acabar”.
► Exposición antológica | “El principio y el fin”.
Galería de Arte Léucade – Del 02 de junio al 25 junio 2017.
Calle Jacobo de las Leyes 8 – Murcia.
► Sala Permanente «Raúl Romero» | Junio: “carboncillo”.
Galería de Arte Léucade – Del 02 de junio al 02 julio 2017.