Lucía Mendoza propone “Identidad”
Entramos en la Galería y, del mismo modo que en Babel se oían y se hablaban muchos idiomas distintos, la primera impresión visual ya deja clara la intención expresa de la exposición: mostrar “Identidad”. Identidades. Distintas y una. Múltiples por el hecho de mezclar fotografía, pintura y escultura, pero una sola, Arte con buen gusto.
Eso es lo que sucede al poner pie en la muestra que ofrece Lucía Mendoza desde el pasado viernes. Una torre de Babel, sin pisos, que trasciende y que habla de identidades tan distintas como los autores que conforman la exposición. Portugal, Alemania y Japón, en lenguajes que son ideario universal y que sorprende por original al estar mezclado. Y no deja de ser atrevido el título que ha puesto la galerista, porque identidad es el “conjunto de rasgos o características de una persona o cosa que permiten distinguirla de otras en un conjunto. La circunstancia de ser una persona o cosa en concreto y no otra, determinada por un conjunto de rasgos o características que la diferencian de otras.”. En la exposición, desde luego, no hay crisis de identidad. Todo lo contrario. Los tres artistas –con la fotografía como base- llegan por caminos distintos al mismo concepto, meditados, hablando de los entornos que rodean a cada uno.
Cláudio Garrudo (Lisboa, 1976). “Prefiero la gente a los paisajes”, y eso en un fotógrafo es un elogio, porque igual que en la pintura el retrato trasciende el entorno y entra en la biografía psicológica, en esta exposición sus “huellas dactilares” dialogan con el tiempo. “Pinto con la cámara, y eso lo aprendí en las islas Azores, donde todo lo original es lo que ves, sobre todo sus gentes”. Confiesa no utilizar nunca postproducción “cuidando los detalles en puro”.
Oliver Czarnetta (Birkesdorf, Düren, 1966). Escultor. Encontró la idea paseando por un mercadillo donde en una caja de fotos antiguas de los años 50, 60 y 70 había imágenes con “identidades” propias, instantes de la vida de una familia en la antigua República Democrática de Alemania. Escultura y vida, observando el detalle de la asociación en lo que él mismo llama «pensamiento instantáneo”. Singular la mezcla entre resina y cemento.
Toshiro Yamaguchi (Okayama, 1956). También “identidad” en la obra de Yamaguchi. Y nos ha sorprendido su “Memory” (2016), papel, alambre y pigmentos que –tal vez- es el hilo conductor con el resto de la exposición pero no “encaja” bien. Y no porque no esté a la altura, sino por la identidad del mensaje y el maridaje con el resto de piezas. Salvando la opinión personal, sus “infinitas mariposas” son belleza pura. Originales, vivas, poéticas. El Ku, del todo y la nada.
La exposición esta muy bien trabajada, cuidada al detalle por la joven galerista, y se nota incluso una mano experta en los pequeños detalles de buen gusto y un magnífico trabajo en la Comunicación de la muestra. Sigue la línea de representar y exponer apostando por la multiculturalidad de sus artistas y, en este caso, con una meritoria originalidad. Muy aconsejable, no os lo perdáis.
Galería Lucía Mendoza, Madrid | Exposición “Identidad”, con Czarnetta, Garrudo y Yamaguchi. Del 21 enero hasta el 25 de marzo 2017.