A Pablo y a Picasso nadie les quiere

Una historia con arte. La del perro que nadie quería por ser “distinto” a los demás. “Picasso” vino al mundo en el patio trasero de una casa de California con la mandíbula superior torcida, “picasiana total”. Al poco de nacer, su hermano “Pablo” y todos los otros cachorros de la misma camada fueron vendidos a diferentes familias –menos él-, nadie quería a Picasso por la extraña forma que tenía en la cara. Una anormalidad facial por la cual su mandíbula superior se gira bruscamente hacia la derecha, haciendo que su nariz apunte también hacia ese lado. Fue enviado directo a una perrera. Pero la historia se complica porque poco tardó en unirse su hermano ‘Pablo’ después de que la familia que lo adoptó tampoco lo quería. A los dos perros les pusieron en una lista de eutanasia para animales.

En ese momento fue cuando, según cuenta el portal The Dodo, el director del refugio canino Luvable Dog Rescue entró en contacto con la perrera preguntando por perros con necesidades especiales. En cuanto le mandaron las fotos, asegura que fue amor a primera vista, y se los llevó con él. Pablo es “normal” pero Picasso, debido a la desalineación de su mandíbula, algunos de sus dientes están metiéndose en el techo de su boca y tiene que esforzarse incluso para comer; es juguetón, esta completamente sano, y a diferencia de muchos humanos, es una delicia de animal.

Al conocerlos, aseguran, nadie entiende como se puede renunciar a ellos: son increíblemente suaves y dulces, juegan con todas las personas que conocen, y tienen un amor intenso el uno por el otro. Hoy, con su hociquito torcido incluido, Picasso es hasta más sociable que su hermano, y ambos tienen ya cientos de solicitudes de familias que desean adoptar a estos dos hermanos.

A buen seguro van a ser muy queridos. ¿Quieres jugar conmigo?…