Sorolla en su paraíso
“Sorolla en su paraíso. Álbum fotográfico del pintor”, es el titulo de la exposición que pretende reconstruir fotográficamente el ambiente creativo de Joaquín Sorolla y su presencia en los ambientes culturales españoles entre las vísperas de la Revolución de 1868 y la Dictadura de Primo de Rivera, mojones históricos entre los que transcurrió la vida del pintor. Dada la importancia de su figura y su condición de genial artista y gloria nacional, Sorolla fue siempre objetivo de los fotógrafos, desde los maestros de su tiempo, como Antonio García, Christian Franzen, Alfonso, Campúa, Guillem Bestard, González Ragel y Venancio Gombau, que le retrataron en sus estudios, en los escenarios de su trabajo, entre las personas de su cercanía familiar y afectiva y en todos los lances relevantes de su vida. Importante en la muestra es la presencia de algunos de los grandes fotógrafos norteamericanos de su tiempo, como W.A. Cooper, Williams M. Hollinger, Harris and Ewing, Gertrude Käsebier y Sebastian Cruset, con los que mantuvo también una relación cercana, tras los viajes realizados a Estados Unidos, con motivo de sus exposiciones de 1909.
Las fotografías de Sorolla reunidas en la muestra nos ofrecen una visión impagable de la evolución del retrato de galería propio de los años recentales de la fotografía, desde la tarjeta de visita hasta los grandes formatos propios de los días que presenciaron el tránsito entre los siglos XIX y XX. Asimismo, estas fotografías resultan indispensables para acercarse al desarrollo del reportaje fotográfico español, propiciado por la madurez de la prensa ilustrada. Desde los días postreros del siglo XIX en que comienzan a aparecer sus retratos en Madrid Cómico o La Ilustración Española y Americana, hasta la apoteosis de su popularidad en las dos primeras décadas del siglo XX, Joaquín Sorolla fue protagonista de centenares de reportajes fotográficos aparecidos en las más prestigiosos publicaciones ilustradas. La presente exposición parte, en buena medida, de los recientes descubrimientos de los fondos de fotografías originales de semanarios y revistas de la importancia de Blanco y Negro, Actualidades, Nuevo Mundo, Mundo Gráfico, La Hormiga de Oro, Crónica, Estampa, ABC y Ahora.
La exposición –abierta hasta el 01 octubre 2017– se compone de 61 copias digitales realizadas en el taller de Castro Prieto a partir de originales de diversas colecciones; 13 copias de época; 3 óleos, obras de Joaquín Sorolla, de la colección del Museo y Originales de prensa, y se articula en las secciones Juventud, Familia, El pintor en el estudio, Madurez, Amigos y Clientes, Sorolla a plena luz y Últimos días. © Catálogo publicado por Palacios y Museos.
La importancia de la fotografía en la vida de Sorolla es conocida. En un tiempo en que el lenguaje de las cámaras apenas contaba para la mayoría de los representantes del mundo cultural y artístico español, contrastando con la atención que le prestaron intelectuales y artistas en América y Europa, Sorolla se mostró siempre atento a la evolución de la fotografía, como muestra su cercanía personal y profesional con fotógrafos de la talla de su suegro Antonio García, el gran patriarca de la fotografía valenciana, y con el danés Christian Franzen, el más Importante retratista y reportero de la España de la Restauración y la Regencia. A ambos los tiene retratados Joaquín Sorolla, en dos retratos admirables no sólo por su propia excepcionalidad en la producción pictórica española, sino por su carácter de mutuo homenaje y celebración entre la pintura y la fotografía. Conocida también es su relación con el salmantino Venancio Gombau, el soriano Rioja de Pablo, y los jerezanos José Demaría López (Campúa) y Diego González Ragel. De ellos se conservan valiosos retratos del maestro, tanto en el Museo Sorolla como en los propios archivos de negativos de estos excelentes profesionales. Una selección de estas fotografías integra la presente exposición.
El interés de Sorolla por el trabajo de los fotógrafos explicaría la cuidada conservación de su legado fotográfico, que debemos especialmente a sus descendientes y a los responsables del Museo Sorolla. Este legado ha permitido al gran público asomarse a los momentos más relevantes de la biografía del pintor, gracias a los catálogos de exposiciones recientes celebradas en museos importantes de Europa y América y en las propias salas del Museo Sorolla. La presente exposición se diferencia de las anteriores en que se centra exclusivamente en la presencia de la fotografía en la vida de Joaquín Sorolla y en la variedad e importancia de sus retratos menos conocidos, partiendo de su propia importancia fotográfica y en su calidad de testimonio y fuente de memoria de la vida íntima y pública del artista.
Se trata, pues, de una exposición eminentemente fotográfica, que nos acerca a la figura de Sorolla y, a la vez, constituye un capítulo importante de la historia de la fotografía española. La muestra pretende convertirse en un trabajo canónico sobre la relación entre Sorolla y los fotógrafos, entre el pintor y la fotografía, un lenguaje muy próximo a su evolución personal y artística, desde los días de formación con Antonio García hasta su época de madurez. Consecuentemente, la fotografía y los fotógrafos tienen en esta exposición un especial protagonismo, dada la calidad de los retratos y reportajes reunidos, que no sólo nos permitirán acercarnos a la figura gigante de Sorolla, sino a uno de los momentos más relevantes de un tiempo especialmente importante en la evolución del lenguaje fotográfico.
La exposición incluye dos excepcionales autorretratos del artista y una cuidada selección de publicaciones gráficas de la época, en las que se publicaron los retratos y Reportajes del pintor, desde su primera caricatura aparecida en Madrid Cómico hasta las decenas de reportajes aparecidos con ocasión de su temprana muerte.
El Museo Sorolla digitaliza y abre su fondo fotográfico.
El Museo Sorolla de Madrid ha presentado el pasado martes la catalogación digital de su fondo fotográfico, compuesto por un total de 6.608 piezas que forman parte de una colección con un gran conjunto de positivos antiguos, una serie de placas de vidrio y rollos de material flexible (como el celuloide). La presentación se ha llevado a cabo en rueda de prensa y será a finales del próximo mes de junio 2017 cuando estará disponible la consulta en línea del catálogo completo para el público que lo desee. Toda la documentación comenzó a ordenarse a partir de 1983 y en 2001 dio comienzo la catalogación razonada utilizando el programa informático DOMUS, implantado en todos los museos dependientes de la Subdirección General de Museos Estatales, con la financiación de la Fundación Museo Sorolla. La digitalización y catalogación final ha sido el último proceso con el objetivo de unificar criterios y facilitar las busquedas en Internet.
El catálogo está compuesto por los fondos reunidos por el propio pintor y los aportados por su hijo, Joaquín Sorolla García, entre los años 1931 y 1948, consistentes en retratos de amigos, algunas actividades del museo y panorámicas del mismo, incluye además fondos posteriores a esa fecha compuestos por panorámicas de las salas del museo y la rehabilitación y obras de la Casa Sorolla y algunas donaciones y recuperación de otras imágenes en distintos archivos. Tal vez, la parte más importante es la reunida por el propio Sorolla, cuyo suegro -Antonio García Peris- fue un prestigioso fotógrafo valenciano, que Sorolla conoció siendo todavía muy joven a través de su compañero de estudios José Antonio García del Castillo, hijo del fotógrafo.
Antonio García dio trabajo en su estudio al joven Sorolla, que desarrolló a partir de entonces un especial aprecio por la fotografía, una afición que posteriormente toda su familia compartiría. A Antonio García se deben las numerosas fotografías del entorno más familiar e íntimo de Sorolla, fotografías cuya calidad asombra por su nitidez y la belleza de su iluminación.