Una donante lega al Prado 800.000 euros para comprar y restaurar obras

Por el hecho mismo de vivir la “semana del arte”, tal vez, la noticia haya pasado desapercibida para muchos. Eso, y que intentar colocar ARTE o CULTURA entre tantas tarjetas black, juicios mediáticos, (tiriti)Trump o –¡esencial en nuestras vidas!- ¿quien puede estar nominado esta semana en Gran Hermano?, el hecho es que la palabra heredar es siempre sinónimo de dinero. Es lo que le ha ocurrido al Museo del Prado, ha heredado. Una donante –hasta ahora “anónima”- ha legado al Museo 800.000 (ochocientos mil) euros, para comprar y restaurar obra.

Carmen Sánchez García, fallecida el pasado 14 de julio a los 86 años, pertenecía a la Fundación de Amigos del Museo del Prado desde el 2003, y en su testamento estableció legar a la pinacoteca madrileña tanto su dinero como una casa en Toledo, disponiendo que se emplease para «la adquisición y restauración de cuadros, específicamente«. La donante era licenciada en Historia y participó en 25 cursos del programa de actividades que organiza la fundación. Ella misma fundó en Madrid el colegio Nervión, en 1973, del que fue profesora y directora. El Museo del Prado desconocía que había sido designado en el testamento de Sánchez García como heredero, y fue el pasado jueves cuando emitió un comunicado agradeciendo la voluntad de esta donante y afirmando que la cumplirán.

Hasta ayer domingo, durante toda la semana pasada, hemos disfrutado en Madrid de las mejores ferias de contemporáneo actual, 296 galerías esforzándose, más de mil artistas exponiendo, miles de obras –desde el grafiti a Dalí-, dibujo, Bacon, Escher, vanguardia y emergentes, decenas de museos a pleno rendimiento… y Carmen Sánchez García, quien a pesar de que los telediarios no han reflejado ni el uno por ciento de lo que se vivía en Madrid [¡ARTE, ARTE, ARTE!] ha dejado su mecenazgo para que, al menos el Prado, pueda seguir manteniendo vivo el espíritu y la magia de crear, disfrutar y apasionarse con el arte.

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